TIERRA DE MURALES

A 2 horas de la capital, Y con el olor a campo, el aroma del café , divisando el humo de la leña, los platanales, la historia y colores de los murales hacen que te trasportes a otra época, se ve una mariposa plasmada en una pared de escuela  y solo piensas: Hermanas Mirabal.

Un pueblo lleno de alegría es villa tapia, gente que baila un buen perico ripiao. Lleegamos al cuerpo de bomberos, disfrutamos de las grandiosas estatuas de madera  creadas por las manos de artistas de la zona, algunos no muy conocidos, pero de calidad mundial; y que te habla de la historia de la tierra de las mujeres guerreras.

En dicha comunidad se celebra la semana cultural cada 4 años, y donde su gente abre sus puertas a turistas extranjeros y nativos para que conozcan sus raíces, su historia, en estas tierras nacen las Hermanas Mirabal,  guerreras por demás de su Republica Dominicana.

Desde entonces fue creada La Ruta de Los Murales, donde 100 artistas del pincel plasman su arte en paredes de escuelas, hospitales y oficinas gubernamentales del área  con pinturas alegóricas a la historia de este bello pueblo, y en la que están las vivencias de grandes luchadores,  y en el cual se disfruta de nuestras raíces. Contemplarlas te transporta y te sientes en ese tiempo, nuestra bandera, las casas de madera ,  y  las mariposas  son parte de las pinturas  que embellecen esta parte del país. Su principal fuente de ingreso es  la agricultura como la yuca , plátano y cacao.

En nuestro recorrido conocimos la comunidad Las Aromas, donde puedes descosechar una rica yuca y saborear un exquisito café hecho en colador de trapo, donde un anciano fuma su “pachuché” sentado en una lata de aceite que  invita a conversar, deleitándote con su época.

Y sin desperdicio bajamos a los cocos, otro lugar acogedor y donde se disfruta de paz, escucha una rica bachata y ves la doña lavando a  mano, un acto para disfrutar del salcocho preparado por doña “joba” una de las pocas ancianas de esos años que ni la edad ni los achaques hacen que deje de cocinar con el mismo sabor de antes.

Nada es lo mismo si no pasamos por el parque Duarte y ver donde estaba el “Tarro Bar” un lugar para recrearse los fines de semana y tomarse una cerveza.

Llegó la noche y toca bailar en Nacauita, los asistente te alan  a bailar nuestro meregue y disfrutar de la noche única en Villa Tapia.